Un líder social y sus seguidores.

Cortesía de Renjith Krishnan

por Silvia Rodriguez Schwartz

De acuerdo con José Martín Cárdenas “El líder social es quien, aprovechando su capacidad de liderazgo, participa en la vida de las comunidades para contribuir a una mejora de la calidad de vida y crear un mundo más solidario. Responde a los principales desafíos de una sociedad mediante acciones surgidas de la reflexión y la planeación.”

En Profexor.com pensamos que, partiendo del núcleo familiar, es imprescindible que exista el desarrollo del bien común dentro de la sociedad. El hombre nace desprovisto de muchas cosas, necesitado de apoyo, incapaz de vivir solo…es así como desde toda la vida vamos formando grupos. Grupos a los que les resulta poco productivo el trabajar independientemente, por carecer de todos los recursos necesarios para su evolución. Y es de esta manera como se crean las redes sociales.

Las redes sociales son estructuras compuestas por varias personas conectadas por intereses comunes. Éstas funcionan a diferentes niveles, desde las relaciones de parentesco o amistad, hasta las de organizaciones a escala estatal (redes políticas) determinando una agenda común y alcanzando así sus objetivos comunes.

Pero volviendo al tema del liderazgo, como bien lo dice elergoeconomista.com: “En esta época, de estridente soledad, de egoísmos enfermizos, de insatisfacción vital; necesitamos referentes cercanos, de comportamientos solidarios y entrega social. Necesitamos aprender a darnos a los demás, para mejorar la calidad de vida colectiva; sabiendo que ante las injusticias no existen murallas infranqueables.” Es por eso que el líder social tiene tanta responsabilidad sobre sus hombros: llevar adelante los propósitos comunes con tesón y asertividad para lograr eficientemente los objetivos grupales, al mismo tiempo ser la voz del grupo o de los grupos y así enriquecer a su entorno produciendo resultados medibles.

En Profexor.com saludamos al líder, pero también a los edificantes seguidores que hacen que la colmena sea más fuerte, porque no hay liderazgo sin seguidores.

¡Un aplauso a aquellos individuos y a aquellos grupos que muestran a través de sus actitudes cotidianas los grandes valores de la vida y el esfuerzo diario por mantenerlos como prioridades!